¿Debiera el creyente, y el no creyente, temer a los tiempos que se avecinan? Tristemente, la respuesta es…

Este breve articulo tiene como objetivo el de  aclarar una duda muy común por estos días, especialmente entre el mundo cristiano.  Y entre aquellos que no lo son, pero que perciben “que algo pasa”.

Los que no deben temer.

Primero debemos entender que el Señor JesuCristo vino a salvar “lo que se había perdido”.

“Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que se había perdido.” (Lucas 19:10).

Así es. El Señor Jesucristo vino a salvar lo que se había perdido. ¿A salvar de qué te preguntarás? A salvar al ser humano del infierno.

Después que Adán y Eva pecaron “todos pecaron” y en consecuencia, quedaron apartados de Dios (Romanos 3:23)

El pecado entró en el mundo como una infección genética se traspasó a todas las generaciones humanas, e incluso afectó a la naturaleza. Y junto con el pecado, entró la muerte (Romanos 5:12)

Dios en su misericordia nos dio formas de cubrir el pecado en el pasado (Antiguo Testamento). Y una forma definitiva en el presente (Nuevo Testamento).

En el pasado los pecados se cubrían temporalmente mediante  un sacrificio con la sangre de un cordero. En el presente (durante estos dos mil años que ya terminan) los pecados son cubiertos definitivamente con la Sangre de JesuCristo.

Así es. En el pasado los pecados se cubrían TEMPORALMENTE con la sangre de un cordero (Esto se puede observar desde Genesis 4:4) , mientras que en la actualidad la Sangre de JesuCristo nos cubre de TODO pecado.(1 Juan 1:7)

El propósito de la llegada de Cristo a la Tierra fue el de salvar lo que se había perdido.

Es ahí donde debes preguntarte si ya eres salvo, o sigues aún perdido.

¿Cómo ser salvo?

Creyendo que:

“Cristo murió por nuestros pecados, según las Escrituras; Y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, según las Escrituras” (1 Corintios 15:1-4)

“Al cual Dios ha propuesto por propiciación POR LA FE EN SU SANGRE, para manifestación de su justicia por la remisión de los pecados pasados, por la paciencia de Dios; Para manifestación de su justicia en este tiempo; para que él sea justo, y justificador del que cree en Jesús. ¿Dónde, pues, está la jactancia? Excluída queda. ¿Por cuál ley? ¿De las obras? No: sino por la ley de la fe. Así que, concluimos ser el hombre justificado por fe sin las obras de la ley. ” (Romanos 3:25-28)

Los Tiempos angustiosos que se aproximan

Si ya eres salvo no tienes nada que temer. Y en esto debemos ser enfáticos.

Se acercan tiempos difíciles para la humanidad. Tiempos en los cuales sobrevivir será un desafío que muy pocos lograrán sobrepasar. Pero Dios es fiel a sus promesas,  y ya ha provisto un rescate a  quienes le hemos creído (a él).

Cuando el Señor Jesucristo se marchó nos dijo que iría a preparar un lugar donde estaremos con él. (Juan 14:2-3) y nos aseguró que volvería para  “TOMARNOS” hacia él.

Esto lo aclara Pablo más tarde,  cuando revela en qué consistirá este misterio: que seremos arrebatados de la Tierra para reunirnos con el Señor “en el aire”. (1 Corintios 15:51-53, 1 Tesalonicenses 4:16-17)

El Señor Jesucristo no descenderá a la Tierra, nos llamará desde las nubes y subiremos.

Hay que aclarar que el arrebatamiento de la iglesia no es la Segunda Venida donde “todo ojo le verá”. La segunda venida será siete años después que la iglesia se haya marchado.

El Arrebatamiento es un evento que esta pronto a ocurrir, y cuando suceda se dirán muchas mentiras. Mentiras como que fuimos “abducidos por extraterrestres”, “exterminados porque éramos un estorbo para la evolución y trascendencia de la humanidad”, entre otras tonterías new age.

Los gobiernos jugarán  al “todo vale” en lo que se refiere a la mejor “explicación” del porqué muchos muertos desaparecieron de sus tumbas, y muchos otros desaparecieron de sus casas, sus trabajos, sus escuelas, etc.

Sin embargo no todos creerán esas mentiras que divulgarán los medios masivos. Y ELLOS serán los “santos de la gran tribulación” que recién creerán el evangelio una vez que se hayan dado cuenta que fuimos arrebatados por Cristo.

Durante ese período, cuando los cristianos salvos ya no estemos, DIOS HARA CAER SU IRA SOBRE LA HUMANIDAD; una humanidad  que eligió creer la mentira y no a la Verdad para ser salva (2 Tesalonicenses 2:10-12).

Por otra parte, el Señor ha establecido en su palabra que también nos salvará de la ira que dejara caer sobre los moradores de la Tierra . Porque:

no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo” (1 Tesalonicenses 5:9)

Sí. Muchos le temen al Anticristo, al Falso profeta,  y a la Bestia. Pero más debieran temer a Dios, pues Él mismo desatará los sellos de Apocalipsis (Apocalipsis 6).

Siete ángeles  tocaran las siete trompetas (que son el “contenido” del juicio del séptimo sello), y serán derramadas las siete copas de la ira (Apocalipsis 16) sobre un mundo terco que no reconoce ni menos se arrepiente de su maldad. (Apocalipsis 9:20-21).

 

Los que sí deben temer.

¿Quiénes debe temer a los tiempos que se avecinan?

  • Primeramente todas aquellas personas “positivas”, que creen que las cosas mejorarán.
  • Aquellos que creen que el ser humano “debe adaptarse a los tiempos y a los cambios”.
  • Aquellos que hoy dicen pertenecer, o estar entre los “despiertos”.
  • Y evidentemente los cristianos. Sí, los que dicen ser cristianos, pero que lamentablemente no son salvos.

Vamos por parte…

El mundo actual esta plagado de personas ingenuas, que viven el “presente”, y que gustan de usar la frase “hay que tener un buen pasar”…

Estas personas, lamentablemente creen que lo que hoy viven es todo lo que hay. Y tristemente, no piensan, ni les interesa el futuro, que por cierto… es eterno.

Por otra parte están los “entusiastas”, adoctrinados por las películas de ciencia ficción,  la ecología, y la nueva era, y  que se sujetan a la idea de que hay que “adaptarse a los tiempos y a los cambios”. En pocas palabras, títeres y esclavos voluntarios del sistema.

 

 

También están aquellos que “despertaron” , la mayoría  durante el  planificado  gran engaño mundial que  se ejecutó durante 3 años en el mundo.

Muchos salieron del cascarón de la ignorancia.

Se dieron cuenta que estaban siendo engañados. Que los hospitales estaban vacíos mientras  tenían a la gente aterrorizada en sus casas. Que sus libertades estaban siendo reducidas, y que además se les estaba inyectando sustancias experimentales que mataron y siguen matando a millares en el mundo. Este es el grupo de los “despiertos”.

Por último tenemos a los cristianos. Pero no cualquier cristiano, sino aquellos que pertenecen a organizaciones que “dicen ser cristianas”, pero cuyos miembros no son salvos.

Y en este respecto abordaremos sólo 3 organizaciones religiosas, muy numerosas, pero que tristemente también son  candidatos a ser esos “santos de la gran tribulación”, por no haber creído AHORA a la verdad para ser salvos.

Se trata de organizaciones religiosas donde hay gente muy sincera, y honesta, pero honestamente engañada.  De hecho, ninguna de estas organizaciones religiosas, aunque se dicen cristianas se sustentan exclusivamente en Cristo.

Y queremos aclarar que, aunque los miembros de estas organizaciones están equivocados, les amamos. Y por eso este artículo.

Nos referimos a:

  • Testigos de Jehová
  • Adventistas del 7mo día
  • Y Mormones..

Todas estas organizaciones fueron creadas con pocos años de diferencia entre ellas. Y hace no mucho tiempo.

Las tres aseguran ser “la religión verdadera”, ó “la verdad”. Y sus miembros son leales a ellas y  a sus preceptos.

¿Porqué nos referimos a estos tres cultos?

Primeramente porque el Señor Jesucristo “no quiere que nadie se pierda” (2 Pedro 3:9).

Tristemente estas tres organizaciones, aunque no lo reconocen,  han desechado la piedra angular, que es el Señor Jesucristo. (Salmos 118:22, Mateo 21:42-43)

  • Las 3 organizaciones han usado como piedra angular de su religión las ideas de Charles Taze Russell, Ellen G. White, y Joseph Smith, respectivamente.
  • Las 3 religiones miran con desprecio al cristianismo bíblico tildándolo de “hijas de la Gran Ramera” (refiriéndose al catolicismo como madre de las rameras).
  • Las 3 religiones tiene su propia literatura. “La Atalaya” y “Despertad” de los Testigos de Jehová., “El Conflicto de los Siglos” (entre otros libros) de Elena White, o el “Libro del Mormón” de Joseph Smith.
  • Las 3 religiones predican “otro evangelio”, no predican el evangelio de Pablo (2 Corintios 11:4, Gálatas 1:8-9)
  • Las 3 religiones ponen énfasis en las (buenas) obras para ser salvo y/o “mantenerse salvo”.

Y como si fuera poco… las 3 organizaciones están fuertemente asociadas  a la masonería. Y no nos referimos al miembro común y corriente que participa de estos cultos, sino a quienes las manejan,  a sus líderes  y ancianos.

Sus miembros han adherido a ellas porque  han encontrado orden, pulcritud, buenas personas, y mucha amabilidad dentro de estos cultos. Y eso no es lo malo. Lo malo es la doctrina. La cual es basada según los lineamientos de sus fundadores,  y no de acuerdo a la Biblia.

La doctrina que enseñan, no es abierta, sino que se establece “entre cuatro paredes”, donde ciertos “iluminados” interpretan y acomodan las  Escrituras de tiempo en tiempo.

¿Cuál es el problema?

En 2 Timoteo 2:15 Pablo, a través de su carta a Timoteo advierte que debemos DIVIDIR bien la palabra de verdad, de modo que no enseñemos tonterías. Y estas religiones, debido a que no han dividido la palabra de verdad han creado su propia interpretación de las Escrituras. Su propia “verdad”.

Es así como los Testigos de Jehová, adventistas o mormones  mezclan cosas que pertenecen al Antiguo Testamento con el Nuevo. Mezclan cosas que pertenecen a Israel, con la Iglesia.

Sus miembros DESCONOCEN COMPLETAMENTE que Israel es una cosa, y la Iglesia de Cristo es otra cosa diferente. DESCONOCEN COMPLETAMENTE los tiempos que vivimos.

Y no solamente eso, sino que debido a que siguen manteniendo los lineamientos de sus fundadores, niegan las palabras de Jesucristo.

Esta escrito:

“Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.

Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará.

Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa.  Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego.” (1 Corintios 3:11-15)

Debido a la dureza del corazón de los lideres de estas organizaciones, que no enseñan la verdad a sus miembros, sino que los empujan al infierno, ACUMULAN IRA  PARA EL DIA DE LA IRA y el justo juicio de Dios (Romanos 2:5, Santiago 3:1)

Sí. Testigos de Jehová, Adventistas y Mormones son candidatos a pasar por la gran Tribulación “por no haber creído a la Verdad para ser salvos” AHORA, cuando pudieron hacerlo. (2 Tesalonicenses 2:11)

Estas tres organizaciones religiosas, al no dividir bien la palabra de verdad, lo han mezclado todo. Han hecho una ensalada entre el antiguo y nuevo testamento. Han agregado y quitado.

Y lo peor de todo: “no han entrado ni han dejado entrar” a sus miembros a la salvación. (Lucas 11:52)

Al mezclar,  y no dividir la palabra de verdad, su teología cae en lo absurdo. Niegan el arrebatamiento de la iglesia,  y aseguran esperar “la Segunda Venida de Cristo”.

  • Sus miembros DESCONOCEN que la Gran Tribulación es por causa de Israel,  y para Israel. (Jeremías 30:7)
  • Sus miembros DESCONOCEN que Jesucristo libra a SU IGLESIA de ese periodo (1 Tesalonicenses 1:10)
  • Sus miembros DESCONOCEN que la Iglesia de Cristo fue comprada con su sangre (1 Corintios 6:20,1 Pedro 1:18-19)
  • Sus miembros DESCONOCEN que la salvación es gratuita, y que las obras de nada sirven para ser salvo ni para “mantener” esa salvación.(Efesios 2:8-9)

Tristemente, muchos de los miembros de estas organizaciones religiosas, así como los que se consideran “despiertos”, una vez ocurra el rapto de la Iglesia, recién creerán a la verdad.

Y en consecuencia serán esos que deberán “perseverar hasta el fin” para ser salvos” (Mateo 24:13-14)

  • Deberán perseverar en la fe,  algunos huyendo sin rumbo fijo, y otros encarcelados en las “ciudades de 15 minutos”,  no dejándose marcar.
  • Deberán perseverar  cuando ya no puedan comprar ni vender.
  • Deberán perseverar cuando la sed,  el hambre y el calor  toque a sus puertas.
  • Deberán perseverar cuando “la autoridad” les de a elegir entre seguir las instrucciones del gobierno (dejarse marcar,  rendir culto al anticristo/bestia/falso profeta) o ser degollado/decapitado. (Apocalipsis 20:4-5)

Cuando la Iglesia se haya marchado

Cuando la iglesia se haya marchado,  muchos miembros de estas congregaciones irán a pedirle cuentas a sus líderes religiosos por haberles engañado,  y haberles privado de la esperanza bienaventurada (El rapto de la iglesia  según Tito 2:13)

Cuéntanos una cosa …

¿Cuánto alcanzaste “a perseverar” cuando te empujaban a inyectarte “voluntariamente”, para poder trabajar, estudiar, comprar, ir a un gimnasio,  o a un restaurante?

¿Una.. dos, tres  semanas…?

¿Sabías que entre creyentes y no creyentes,  fuimos muy pocos los que no nos dejamos engañar,  ni amedrentar? Fuimos muy pocos,  los que a duras penas,  aguantamos las restricciones, el acoso, la segregación y la discriminación durante  3 años de engaño.

¿En serio crees que vas a “perseverar”  durante 7 años mientras el mundo se cae a pedazos,  hasta “la Segunda Venida de Cristo”?  ¿En serio?

El Señor Jesucristo viene por su iglesia, ANTES que todo eso suceda.

  • ¿A quien le vas a creer?
  • ¿A los hombres que manejan tu religión?
  • O ¿Creerás a Cristo y a su Palabra?

Esta escrito:

“El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio. ” (Marcos 1:15)

 

“Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.” (2 Corintios 6:2)